Es importante revisar la previsión meteorológica concienzudamente y no menospreciar la lluvia y las tormentas en la montaña, que pueden ir acompañadas de fuertes vientos, bajadas de temperatura, granizo y rayos.
Así pues, si la probabilidad de tormentas supera el 50%, deberíamos evitar salir de marcha al monte. Si bien resulta difícil realizar pronósticos meteorológicos precisos y acertados durante los periodos de cambios estacionales, contad con que los días extremadamente calurosos son proclives a la aparición de tormentas sin previo aviso a partir del mediodía.
Sabed que las lluvias intensas en montaña pueden provocar variaciones en el tipo de terreno esperado, como son zonas embarradas, aumento de los caudales, firme resbaladizo, desprendimiento de rocas, así como caminos y sendas intransitables. De modo que habría que evitar itinerarios que crucen cauces de ríos o torrenteras cuando estos no dispongan de puentes adecuados. Y, por supuesto, anular actividades como el descenso de barrancos o rutas que pasen bajo paredes rocosas expuestas a la caída de piedras.
Y si el temporal os pillara desprevenidos, recordad unos consejos básicos:
By accepting you will be accessing a service provided by a third-party external to https://www.fmm.es/